Irritabiidad, falta de agrado por vivencias que antes le generaban satisfacción, conflictos o agresión con sus pares, divorcio o separación de los padres, cambios en el medio ambiente familiar o escolar que afecten la rutina normal del niño.
En este proceso se usa test proyectivos, relatos, narraciones, observación clínica de su lenguaje verbal y no verbal que son fuentes valiosas de información sobre su estado emocional.